lunes, julio 21, 2008

Xabier vila-Coia explica sus declaraciones del jueves pasado

Texto completo de la aclaración de Xabier vila-Coia
ACLARACIONES DE XABIER VILA-COIA TRAS SU INTERVENCIÓN EN EL PROGRAMA "LA NOCHE MENOS PENSADA" DE RNE-RADIO 1, EN LA MADRUGADA DEL DÍA 18 DE JULIO DE 2008

Estimados amigos de La noche menos pensada:
Me dirijo a vosotros por el efecto indignante que tuvieron en algunos de los oyentes de vuestro programa mis apreciaciones respecto a una supuesta mayor inteligencia de los blancos sobre los negros.
La frase "Los negros son menos inteligentes que los blancos" que habéis colgado en vuestro blog está descontextualizada e insuficientemente explicada.
Mi apreciación sobre las diferencias entre blancos y negros se trata de una observación empírica (no científica pues yo jamás perdería el tiempo en tratar de demostrar "científicamente" que una cuestión de este tipo pueda ser irremediablemente cierta, o falsa; porque: ¿qué más da?) hecha docenas de veces y que es solo eso: una simple observación, pues carece de finalidad más allá de describir algo que viví y que me chocó y me llamó la atención; como me sucedió con muchas otras cuestiones en Cuba.
Para que no quede ninguna duda sobre mi reflexión, cito a continuación el pasaje textual del Diario no velado de La Habana (páginas 353 y 354), donde expongo mis observaciones e hipótesis al respecto:
Paso por el mercado de San Lázaro y M para saludar a los compañeros Telmo y Daniel. Thomas, que ya se incorporó a trabajar tras la amputación de una falange, lo hace con un apósito sobre el dedo y un guante de lona gruesa. Tiene que trabajar, porque si no ingresa dinero no come.
Bromeo con los tres. Daniel me ofrece un billete de 3 pesos con la efigie del Ché, en buen estado de conservación. Pide 2 $ USD. Le propongo un dólar. Me lo deja por 1,5. Thomas emite un curioso comentario: «A los españoles le perdonamos casi todo. Le perdonamos que matasen a Céspedes, a Maceo, y hasta que mataran a Martí. Lo que no le perdonamos es que hayan traído a los negros». Aunque lo soltó en tono de broma, me interesé porqué pensaba así. «Porque los negros son los que roban los pollos, las carteras, en las casas de la gente...». Entonces le planteo: «¿Y en los países en los que no hay negros, quiénes roban todas esas cosas». A lo que respondió: «¡Ah, yo no sé lo que ocurre en otros países, pero aquí es así».
Esta respuesta me obligó a meditar. ¿Qué me importa a mí que me atraque o asesine un negro (o un blanco) debido a una supuesta «maldad» o «tara» biológica intrínseca de su raza, o como consecuencia de su bajo nivel socioeconómico? El resultado, a mis ojos, será el mismo. Además, entiendo que en el futuro y gracias a los imparables avances genéticos que se están produciendo, será más difícil modificar una conducta social condicionada por la influencia ambiente que por el resultado de la actividad de un gen o un grupo de genes.
Fui más allá, todavía. Porque percibí que, en general, los negros y negras son menos inteligentes y más torpes que los blancos. Podría deberse –es posible– a que su entorno social y medios de vida son manifiestamente empobrecidos y deficientes. No obstante, tampoco descarto la base biológica.
Sabido es –y a nadie se le ocurriría negarlo– que la raza negra es superior a todas las demás en fuerza y resistencia físicas; hasta tal punto que no es descartable que en un futuro próximo haya que organizar pruebas deportivas (olimpiadas, campeonatos del mundo de atletismo, competiciones de fútbol y baloncesto, etc.), exclusivamente para deportistas negros, del mismo modo que ya existen en la actualidad para hombres y mujeres debido, precisamente, a la supremacía masculina.
Una de las causas –conocida–de la preeminencia atlética de la negritud es la diferente proporción de fibras rojas y blancas en sus músculos que le otorgan mayor potencia y
velocidad, y no cabe descartar una preponderancia fisiológica innata de los aparatos cardiocirculatorio y respiratorio. Yo creo que estas diferencias histofisiológicas somáticas que hacen a la raza negra superior físicamente a la blanca, se corresponden con diferencias histofisiológicas cerebrales que otorgan a los blancos una mayor competencia intelectual. El origen de esta disimilitud estaría en la evolución.
Si es cierto que el ser humano se originó en África, cuna de la negritud, y en su desarrollo como especie fue perdiendo aptitudes físicas y adquiriendo facultades intelectivas, en parte asociadas a desplazamientos geográficos –con todos los retos que conllevan–, no parece descabellado hipotetizar que la raza negra, al permanecer en el lugar de origen de nuestra especie, no sufriera las transformaciones histofisiológicas e histoquímicas cerebrales que sí ocurrieron en los congéneres que optaron or el cambio radical de hábitat.
En fin, esto no es sino mera elucubración; razonable. No obstante, elucubración. Y aunque fuese cierta no ha de dar lugar sino a políticas de no discriminación.

De estas palabras no me retracto ni una coma; y no hay en la actualidad en todo el mundo biólogo, neurofisiólogo o paleontólogo que, aplicando de forma rigurosa el método científico, pueda refutar —ni demostrar— mi hipótesis; entre otros motivos porque no se sabe apenas nada de la herencia genética —y absolutamente nada de la epigenética— de la inteligencia. No obstante, debo aclarar que personalmente me resulta indiferente que, en general, los negros sean más fuertes y veloces que los blancos, los blancos más inteligentes que los negros, los hombres más altos que las mujeres, los elefantes más pesados que las hormigas, los leones más feroces que las cebras o las rosas más bellas que los cardos. Por algún motivo que desconozco, a quien parece no serle indiferente es a los demás.
Atte.
Xabier Vila-Coia
Madrid, 20 de julio de 2008

2 comentarios:

laszlo dijo...

Yo creo que para ser empírico, y sólo ver el resultado final, y no las condiciones de que eso se produzca, es sorprendente de un antropólogo. En realidad, son excusas...

tilita penin dijo...

S´Por qué no le damos la vuelta al mundo y ponemos a los negros en el sitio de los blancos y viceversa?.Sera que Nelson Mandela,Ralph Bunche,Desmond Tutu,Albert John,por citar unos pocos son o eran menos inteligentes que Willy Brandt,Oscar Arias,Adolfo Perez Esquivel?.Todos estos fueron Nobel de la paz los primeros negros y los otros no.Los primeros(los negros)no sé si por inteligencia o inspiración divina(esto lease con sorna)fueron capaces de discernir entre lo que estaba pasando y lo que deberia de pasar,la opresión,no respetar los derechos humanos,la discriminacion.......No logro entender como llegaron unos y otros al mismo sitio.Yo no estoy nada puesto en antropologia,pero por mi esperiencia laboral he visto como cuando se estimula al ser humano desde su mas tierna infancia la respuesta es totalmente diferente a otro no estimulado en el mismo grado.Leamos un poco de historia de esta nuestra piel de toro,en los años 4o y 5o y metiendonos en la españa profunda los niños eran totalmente diferentes a los de las clases pudientes y aquellos que tenian un tutor personal ya ni te cuento.Si se pudiera hacer un experimento con seis infantes blancos y seis infantes negros criarlos en Oslo ,p.ej.y ver año año su evolución nos dariamos cuenta de que la diferencia solo estaria en el color de la piel,porque los habria inquietos,vagos,remolones,avispados,simpaticos,puñeteros.............tanto para un bando como para otro.Ya esta bien dejemonos de marear la perdiz,demos LAS MISMAS OPORTUNIDADES A LOS NEGROS QUE A LOS BLANCOS y veremos que pasa.No recuerdo quien lo dijo pero fue algo así como:Si las razas dependieran del color de los ojos no estariamos en este momento hablando de negros y blancos.Y en cuanto al escrito de vila-coia para no importarle mucho le dedico bastante espacio y tiempo.